A reformar que el mundo se va a acabar

Una vez más. No entiendo si la verdad es que necesita urgentemente que las luces de los flashes y cámaras de televisión le alumbren la cara, o es que la medicación ya no hace efecto después de tantos años y ya no le impide hacer lo primero que le venga a la cabeza.

Nuestro presidente, una vez anuncia medidas efectistas para mantenerse (o subir en las encuestas), en esta oportunidad se trata de la tan mentada, tan esperada, y tan intentada reforma del Estado, y no encontró mejor idea, además de anunciarlo un domingo, que anunciando la reducción de OPD's (Organismos Públicos Descentralizados) y programas sociales. En realidad, la duplicidad de funciones existe dentro del aparato estatal y que los tan mentados programas sociales han funcionado como planilla del partido de turno es cierto también, (recordemos el Pronaa, A Trabajar Urbano y Pronamach durante el Toledismo), pero de ahí a tomarnos en serio que reduciendo, fusionando o eliminando estos se hace una buena reforma del Estado, es mucho decir.

Una necesaria reforma del Estado, no pasa solo por buenas intenciones o medidas de corto plazo, se hace imprescindible reformular las estructuras, replantear la carrera pública (que dejaría de lado la estupidez de reducción salarial, sobre todo a funcionarios de carrera) descentralizar el aparato, implantar evaluaciones de personal, etc, etc. Pero sobre todo, como afirma Rosa María Palacios, una verdadera reforma pasa por eliminar el clientelismo, y acabar con las fuerzas exógenas e internas que lo implantan, ya sea desde lobies congresales io apetitos privados dentro del ejecutivo.

Alan, va mal, su soberbia pura (caso Alan Wagner, o la insolente llamada de atención dominical a Yehude Simons) va a ayudar muy poco a que esta reforma se logre, puesto que esta misma soberbia lo envilece, y le hace desviarse de la realidad, dejando a su partido, tomar ciertas riendas, de mediano calibre, pero importantes en el quehacer político, y las figuras que toman la palestra, tristemente ayudan al mandatario (entiéndase Mulders, Velásquez Quesquén, Zumaetas).

Mañana García, dará en cadena nacional, una exposición sobre los avances (¿y logros?) de sus primeros 180 días como presidente, él mismo ha tratado de minimizar el tema diciendo que a este anuncio no lo llamaría "mensaje a la nación" por tratarse de una denominación muy "pomposa".

¿Quién te entiende Alan?

Link: Reformar el Estado ¿para lograr qué?

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